Desde el lado Oscuro de la Luna III
De la liviana materia con que se construyen las historias, las palabras forman una fuerza encabronada cuando se presentan en el lugar, a la persona y ante los oídos adecuados, por ello me encanta el cine y todo su universo multifacético de procesos que inician en una libreta, ante una hoja en blanco, proyectándose en la pantalla, moldeándose en la edición… por lo que no dude en aceptar la invitación de mi amigo Roberto a una charla sobre la narrativa y el cine.
La cita fue en la USBI y aunque comenzó con una hora de retraso, el café y las galletas fue el consuelo de muchos por lo que nadie abandono el cometido que era recibir a la señora Silvia Lemus viuda del escritor Carlos Fuentes quien mostró de manera especial su afecto por quien fue su marido pues preparo una de las mejores presentaciones que he presenciado, sincronizando cronológicamente un material audiovisual con la lectura de los dos primeros capítulos del libro póstumo de Fuentes acerca de su pasión por el cine con anécdotas en Xalapa y en la ciudad de México , en sus llamados años dorados; Lo que hizo que la charla fuera especial es sin duda las bromas o hasta balconeadas que se aventó un buen humorado Alejandro Iñárritu que sin duda era la estrella del lugar, el motivo de la espera y asistencia de la concurrencia, la simplicidad con que expresaba el proceso de grabar, editar y realizar un filme sólo demostraba la vocación nata que tiene para hacer cine, de la importancia del casting, trato y convencimiento de sus actores, de los retos que se sortean por cumplir un cometido tal como narro en su experiencia por encontrar una chica japonesa muda que proyectará lo que él quería y readaptarse por encima de su idea original en fin una charla rica en datos y puntos de interés para todos los cinéfilos que ahí nos encontrábamos; Rodrigo García, el otro cineasta que recibió medalla ese día, no pudo estar presente par recibirla, pero con ayuda de la tecnología se trasmitió una entrevista que la señora Lemus le realizó, misma que fue respondiendo Iñárritu en simultáneo; fuimos puntuales al llegar y los últimos en irnos… estábamos más que contentos, saludando a medio mundo cuales reinas de primavera, sé que todos los asistentes fuimos afortunados, pues vimos una cara en los panelistas que no siempre se ve, se les notaba relajados, platicaban de encuentros del ayer por Paris, por los Ángeles y por tantos lugares que al día de hoy me suenan aun en la distancia, pero tal como narro Alejandro los jóvenes de México al día de hoy ya pueden soñar con hacer cine internacional, su generación ha trascendido las barreras sociales, y hasta aguantan bara del mexican style.