Obras de Haydn y Shostakovich, ofrece este viernes la Filarmónica de Boca del Río
Bajo la dirección de Jorge Mester y con Bella Hristova como solista.
La presencia de la virtuosa de origen búlgaro Bella Hristova y su recreación para el Concierto número 1 para violín y orquesta de Dmitri Shostakovich, se establece como uno de los principales atractivos en la audición que anuncia para este viernes 29 de enero la Orquesta Filarmónica de Boca del Río bajo la dirección de su titular, el renombrado maestro mexicano Jorge Mester.
El programa incluye la Sinfonía 104 en Re mayor, conocida como “Londres”, del austriaco Franz Joseph Haydn, y la mencionada partitura del maestro soviético. Dará inicio a las 20 horas en el Teatro “Fernando Gutiérrez Barrios” de la zona conurbada, con charla precia de apreciación a las 19 horas en el mismo recinto.
Hristova ha sido aclamada por la prensa especializada gracias a su pasión y el poderío de sus actuaciones, así como su hermoso sonido y convincente dominio del instrumento. Fue galardonada en 2013 con el Avery Fisher Career Grant, y en las temporadas recientes ha mostrado un amplio repertorio, que va desde obras de Bernstein y Corigliano a Prokofiev y Sibelius. Desarrolla una intensa actividad como ejecutante de música de cámara, así solista con orquestas como la Sinfónica de Mississippi, City of London Sinfonia, Sinfónica de Venezuela, Sinfónica Nacional de Estonia, del Centro Nacional de las Artes de Canadá y Sinfónica de Cheongju (Corea). También ha participado en importantes festivales internacionales y ha sido distinguida con numerosos premios y galardones.
Interpreta en un instrumento Nicolò Amati de 1655, que fue propiedad del violinista Louis Krasner.
Las obras a interpretar
La Sinfonía 104 es la última de las doce sinfonías que Franz Joseph Haydn (1732-1809) escribió en Londres, y aunque el grupo es conocido como “las sinfonías londinenses”, solo ésta es denominada con el nombre de la capital británica. Por añadidura, es la que cierra un dilatado ciclo sinfónico en que seguramente hubo más creaciones, algunas de la cuales llegaron a nosotros incompletas o se sabe de ellas por la correspondencia del autor.
Haydn alcanzó aquí el pináculo de su creatividad como sinfonista y actualmente se le conoce como “el padre de la sinfonía”, aunque no haya sido el creador de esta forma musical. Pero fue él quien la tomó del Barroco tardío, la cultivó durante un largo período y con ello se estableció como el sinfonista más importante del Clasicismo, al lado de Wolfgang Amadeus Mozart.
Por lo que respecta al Primer concierto para violín de Dmitri Shostakovich (1906-1975), corresponde a otro de los momentos difíciles en el trayecto creativo de este autor. En 1948 tuvo lugar la llamada “purga de Zhdanov”, y Shostakovich fue uno de los autores acusados de componer música formalista y antipopular, “ajena” al pueblo soviético. Este Concierto fue dedicado al gran violinista David Oistrakh y solo pudo estrenarse hasta el 29 de octubre de 1955, dos años después de la muerte de Stalin, con el propio Oistrakh como solista de la Orquesta Filarmónica de Leningrado bajo la dirección de Yevgeny Mravinsky.
Hoy, con el paso del tiempo y la justa valoración de la obra de Shostakovich, se establece como una partitura de gran lirismo y estructu
ra totalmente abstracta, sin aquel falso optimismo que interesaba proyectar a los burócratas.
Como es evidente, Shostakovich tuvo el infortunio de vivir bajo uno de los regímenes políticos más opresivos y crueles con el arte musical, pero con la apertura propia de la “época del deshielo”, luego de la muerte de Stalin, llegaron los reconocimientos a su talento y tuvo la oportunidad de viajar a Estados Unidos para recibir el Doctorado Honoris Causa que le otorgó la Universidad de Oxford, entre muchas otras distinciones internacionales.
Esta audición es un acontecimiento cultural altamente recomendable. Si usted requiere más informes al respecto, le sugerimos solicitarlos en las oficinas del Teatro “Fernando Gutiérrez Barrios”, que se ubica en Revolución 350, zona Centro de Boca del Río, o llame al teléfono (229) 956 72 50.
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