Un teatro diferente, una propuesta interesante "Irse y volver en tren"
Dirección de Erick Saín
Irse y volver en tren nos platica acerca de los cambios. Nos abre un espacio de diálogo en el que podemos poner nuestras ideas para intentar entender si una transformación en la vida puede resultar en algo bueno o malo. Dos personas con una rutina muy marcada se enfrascan en un par de situaciones por algo que todos inevitablemente hacemos, crecer. A medida que la obra se desarrolla podemos entender que las dificultades que se presentan se deben al cambio precisamente, y que nuestros personajes deben empezar a tratar con situaciones y momentos nuevos para ambos.
Si bien la historia nos presenta un final agradable y feliz, entender la transformación que llevan los personajes a escena puede resultar un poco más complicado. Empezando porque La Niña, comienza a sumergirse en su mente una y otra vez con la finalidad de darle sentido a lo que vive, y a lo que empieza a descubrir, que si bien está representado muy bien, puede confundir al espectador en cómo ella mezcla la fantasía de su mente con la realidad en la que vive.
Por otra parte tenemos al hermano, que la cuidó desde pequeña y que trata de hacer lo posible porque ella esté bien, que aunque a veces pareciera el mínimo esfuerzo, conforme se desenvuelve la historia notamos la dificultad y la impotencia de hacer que las cosas sigan como siempre las ha conocido puesto que se transforman, cambian y nuevas situaciones que para él no existían empiezan a suceder.
Esta obra muestra una propuesta escénica diferente que con un mínimo de utilería, le da vida a espacios diversos y situaciones únicas dependiendo de su disposición física en el escenario. El trabajo actoral también resulta interesante puesto que pasar de imaginación a realidad, en un plano que desde el comienzo no es real puede resultar todo un reto para el actor, mientras que desempeñar más de 3 personajes con psicología y características diferentes son un ejemplo de lo que el esfuerzo, ensayos y técnica, todo esto sumado a la visión del director, pueden lograr.
Esta es una obra para pensar, para tomar una taza de café, para platicarla una y otra vez, y para hacernos entender que inevitablemente el mundo se mueve, y que hoy no es igual al ayer, y que el futuro puede ser completamente diferente a lo que habíamos conocido toda nuestra larga o corta vida; así como también para mostrarnos que la realidad está aquí, y que en la realidad es donde los sueños deben ocurrir. Felicidades para la producción y la compañía.
